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Erva Brito y el trabajo con los atletas discapacitados

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El Centro de Investigaciones del Deporte Cubano (CIDC) apoya con sus estudios y logros científicos a los atletas con discapacidad. La doctora Elba Brito Vázquez dirige el proyecto de evaluación integral de la preparación para deportistas con condiciones especiales en el alto rendimiento.

Deporte Total dialogó con esta especialista con el propósito de conocer sobre los detalles del proyecto. La ciencia vinculada al deporte toma importancia en una sociedad inclusiva, por ello destaca la labor que realizan.

¿En qué consiste este proyecto?

«Comenzó en enero de 2022 y posee 18 integrantes, compuesto por estudiantes de la universidad y una doctora del Centro de Investigaciones y Restauración Neurológica (Ciren) que atiende las temáticas relacionadas con el sueño, además de investigadores del centro.

«Este proyecto realiza evaluaciones de todas las áreas de la institución con los atletas discapacitados. Actualmente, hemos llevado a cabo estudios con parataekwondo, parabádminton y los judocas, a los cuales efectuamos pruebas de cardiología, biomecánica y estudios de contrarios. También de velocidad de reacción y el test de sueño, pues el resultado final es una evolución integral de los mismos».

Entre los objetivos del proyecto se incluye la obtención de buenos logros tanto en los Parapanamericanos de Santiago de Chile como en los Paralímpicos de París. Coméntanos… 

«En efecto, incluso hicimos pruebas antes del clasificatorio a los atletas de parataekwondo, donde hay varios clasificados y se encuentran concentrados en la capital. Las mismas las repetiremos con el propósito de ayudar en gran medida a los entrenadores, ofreciéndoles resultados en tiempo real». 

¿Cómo han asumido los atletas el trabajo con la ciencia?

«Es un trabajo de gran impacto, no solo para los atletas sino para los entrenadores, y en el país ha sido acogido muy bien. Estamos recibiendo solicitudes de provincias porque no todos los deportistas con discapacidad se encuentran en la capital.

«Ya estuvimos en Cienfuegos con el parabádminton. Luego lo continuamos aquí en La Habana antes de ellos salir al clasificatorio. En estos momentos casi todos los deportes están demandando nuestros servicios».

Para ustedes como científicos tiene un alto grado de sensibilidad trabajar con estos atletas… 

«Para nosotros ha sido una tarea compleja, pues hemos debido estudiar constantemente. Estos atletas pertenecen a clases, tienen una clasificación para competir, por lo que el grupo que forma parte del proyecto, en su mayoría jóvenes, tiene que investigar sobre las particularidades de ellos.

«Reviste una gran importancia, dado que en el Centro este es un trabajo nuevo que nos está dando frutos. Además, es de amplia sensibilidad pues conocemos interioridades de los atletas que nos acercan incluso más allá de las investigaciones. Hemos hecho una labor buena con ellos y estamos muy contentos».